Estatua de la Libertad

Table of Contents

La Estatua de la Libertad, una maravilla neoclásica fue un regalo de Francia a Estados Unidos en 1886 y es probablemente una de las estatuas más conocidas del mundo.

Los visitantes de Liberty Island, donde se encuentra la estatua, pueden elegir entre disfrutar de la vista desde el suelo o ascender hasta la corona para disfrutar de una vista sin igual.

La Estatua de la Libertad no puede sino inspirar, se observe como se observe. Es un recordatorio de su papel como primer rostro que recibió a los inmigrantes que llegaban a América en busca de una vida mejor.

Es realmente un lugar impresionante y uno de los mejores sitios que visitar en el estado de Nueva York.

«Dadme a vuestros cansados, a vuestros pobres, a vuestras masas apiñadas que anhelan respirar libres». Estas famosas líneas proceden de un poema que celebra este monumental símbolo de la libertad.

Consejos para visitar la Estatua de la Libertad

Aquí hay algunos consejos para ayudar a maximizar su visita a la Estatua de la Libertad:

Planifica con anticipación: reserva tus boletos y asegúrate de llegar temprano.
Usa ropa cómoda y calzado adecuado para caminar.
Lleva agua y alimentos si deseas.
No hay bolsas ni mochilas grandes permitidas en la isla.
Toma un ferry desde Battery Park en Manhattan.
La escalera y la subida al interior de la estatua están cerrados al público.
Hay restricciones de seguridad, incluyendo controles de seguridad y búsqueda de bolsas.
Toma un recorrido guiado para obtener información sobre la historia y el significado de la estatua.
Explora la isla y sus instalaciones, incluyendo el museo y el teatro.
Considera la posibilidad de visitar durante un día menos concurrido o en un horario menos popular.